ORACIÓN PODEROSA A SAN MARTÍN DE PORRES PARA LA SALUD.🙏🏻✨
Milagroso Santo San Martín de Porres; conociendo las innumerables curaciones que procuraste en vida a tantas personas, especialmente a los más humildes, y que seguiste realizando después de tu muerte; acudo a ti con toda mi fe y esperanza.
Es imposible ignorar la cercanía que tienes a nuestro amado Padre celestial, que te ha adornado con tantos dones espirituales que tú has sabido cultivar y aprovechar en favor de quienes acudimos a ti.
San Martín de Porres, ¡ruego en este día tu intercesión por mi salud!
Tu conocimiento en medicina, tu cercanía a Dios y tu absoluta entrega al servicio de los demás, te han hecho uno de los más reconocidos santos de nuestra amada iglesia católica.
Por eso, amado Santo San Martín de Porres, te entrego esta oración urgente por la sanación que tanto necesito.
Por el amor que tienes por nuestro Señor Jesucristo y por nosotros tus hermanos, te pido este milagro por la recuperación completa de mi salud.
Aunque parezca que es imposible, te pido que se manifieste en mi cuerpo físico toda la sabiduría de la medicina y sobre todo la fuerza del Espíritu sanador de Dios todo poderoso, actuando por intercesión tuya.
San Martín de Porres, te pido que desaparezcan todos los dolores y síntomas que me atormentan, me incapacitan, me llenan de miedo y no me dejan seguir con mi vida plenamente.
Socórreme amado Santo, mírame con la compasión que siempre te ha caracterizado por tus hermanos; vela por mi salud para que vuelva a sentir la vida en todo mi ser.
Te pido también que intercedas por el perdón de mis pecados de los cuales me arrepiento sinceramente, para volver a tener, no solo una vida física nueva sino también la liberación de mi alma.
Sé que me escuchas San Martín de Porres, y sé que te complaces en ayudarme como lo haces siempre con todos los que sufren. Te doy infinitas gracias, porque sé que no puedo tener mejor ayuda en el cielo que la que proviene de tu bendita santidad.
Por intermedio tuyo me acerco a nuestro Señor Jesucristo y le entrego esta enfermedad que me ha causado dolor, pero que a la vez me ha acercado hoy a ti y ha renovado mi fe.
Amén.
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